El infierno es un grupo de WhatsApp

Me salí de un grupo de WhatsApp de antiguos alumnos de un colegio católico porque tanto exabrupto cateto y facha era insoportable. No fui el primero ni el último. Esta es la película que me he montado con esa excusa. Una película en la que sale un depredador sexual, muchos hombrecillos que se ponen de perfil cuando les toca, los cómplices justos y necesarios que el mal necesita para medrar y para colmo el bueno resulta que no es el que parecía al principio.